martes, 24 de junio de 2014

Existencia (2da parte) La imagen

Cuando vemos una película,o cuando leemos un libro,por ejemplo una novela, tratamos con imágenes,unas están en la pantalla y otras se van formando en nuestra cabeza con las palabras escritas.El autor del libro nos describe por ejemplo, una habitación vacía y sombría, y de algún modo la visualizamos en nuestra cabeza.En la película se ve una habitación vacía y sombría etc. digamos que el director de la película leyó el libro y quiso filmarlo,muchos ejemplos hay de este tipo.Cabe preguntarse :¿las imágenes que vemos son de la misma calidad que las que imaginamos? desde ya,intuitivamente sabemos que no pero ¿se puede hacer una distinción más fina de las diferencias?Imitando un poco a Freud diré lo primero que me viene a la mente, y es el llamativo poder de la conectividad por internet y por teléfonos celulares,en especial sobre los adolescentes y también sobre los adultos más jóvenes. Haciendo un paréntesis sobre la cuestión de la comunicación ,pondría el foco sobre las imágenes que se transmiten por esta vía,¿qué pasa con ellas?Lo primero que se me ocurre es que no tengo noticia,por lo menos hasta ahora, de alguien adicto a los libros,de adicciones a la lectura,ni tampoco a mirar cuadros. En cambio la televisión,las computadoras y los teléfonos producen una especie de atracción que hace difícil el corte,una atracción al modo de las adicciones donde nunca es suficiente y eso siempre quiere más. Y digo Eso como nuestra x  a despejar.
Hablemos ahora de algunas cosas que no tienen aparentemente nada que ver : las imágenes que vemos de la película y las que nos formamos del libro, ¿ocupan el mismo lugar en nuestro cerebro?Me gustaría saber si algún neurólogo ha estudiado esto...Por otro lado, ¿tendrán el mismo espesor?  con espesor ¿a qué me refiero? En la imagen que nos formamos de la historia hay inevitablemente algo de nosotros,quizás la habitación no estaba tan oscura,o quizás nos pareció ver una silla,una mesa. En la imagen de la película vemos lo que el director vió en su cabeza y decidió plasmar,vemos algo de él,si es un buen director, nos transmite algo de su propio sentir,que le da un aire propio.  Si la película es mala ¿qué significa? no nos transmite nada, nos quedamos como la habitación vacía,no hay nada que recordar con excepción del aburrimiento(que no es algo menor) vemos la literalidad de una habitación vacía que no deja margen a imaginar algo diferente. A ese margen lo llamo espesor. Cuanto menos posibilidad de imaginar,algo propio y diferente,hay menos espesor. Actualmente vivimos en un mundo lleno de imágenes,televisión,computadoras,etc. imágenes de mucha literalidad y con poco margen a lo propio, a excepción de las redes sociales , de intervenir compartiendo o poniendo me gusta,posibilidad bastante precaria para aliviarnos ¿de qué? : De vaciar el lleno que producen las imágenes que aplanan el psiquismo.No sé si habrá estudios neurológicos, pero puedo aventurar una hipótesis acerca  de la que ocurre con nuestro psiquismo en este panorama, se aplana,queda sin espacio propio,como si tuviera dos dimensiones alto y ancho,sin espesor como es cualquier pantalla.Ahora viene la parte difícil,que no me es fácil fundamentar: eso aplastado pide más aplastamiento,por si hubiera algún resquicio de espesor,quiere asegurarse que todo esté aplastado (y no voy a meterme con los efectos que esto produce en la imagen corporal,en especial de los adolescentes)  Por tanto el efecto adictivo está asegurado,porque nada propio puede decirse,sólo se repite y se repite por sí mismo ,igualando todo.No existe más lo propio y singular de cada uno,la falta de espesor en el psiquismo nos hace descreer,de la existencia de lo que sea,de nosotros mismos, de los otros,de lo trascendente.Esto ocurre más que nada a nivel inconsciente  A veces también es conciente  -sería mejor-pero no es lo que abunda.Los que tienen algún arte pueden percibir esto con más facilidad y ponerse a resguardo,de este aplastamiento que enferma .

martes, 27 de mayo de 2014

Existencia( primera parte)

Desde el psicoanálisis,el ortodoxo y en especial el lacaniano,se ha planteado,más bien se ha dado como un hecho,que devenir ateo era una especie de conclusión lógica,de acuerdo con ciertos conceptos como el del otro (A de autre de Lacan) donde se  plantea que en el primer otro paterno-materno omnipresente para el niño,necesario por demás,está el origen de las neurosis y por qué no de las psicosis.Muchos trabajos que he leído de muchos psicoanalistas actuales y no tanto,plantean que modificaciones  de lo edípico estructurante, atravesamiento de fantasías inconcientes incestuosas,(o mas específicamente logrado:el atravesamiento del fantasma) llevan inevitablemente a una relación diferente con el otro y necesariamente este devenir ateo tiene que hacerse presente.Es aquí que en estas ideas se infiltran las viejas aspiraciones o voluntad? del psicoanálisis de ser ciencia(porque además compite en un mercado de saber que  valora: pone signos mas + o menos - a las ideas)Su  voluntad de convertirse en ciencia,para sobrevivir en el mercado, entonces lleva a  consideraciones sobre otros campos.Uno predilecto y blanco elegido a menudo, es el de la religión.Como en alguna parte Freud también incursiona en este punto y Lacan retoma esto en el concepto del A (otro) se avanza más aún sobre la cuestión religiosa y se confunde el concepto de A ,otro lacaniano con el concepto de Dios (como si de Dios pudiera hacerse un concepto-si estuviera Renée Guenon aquí, quizás estaría de acuerdo conmigo) reducir a Dios a un concepto a demostrar es una vieja aspiración de la voluntad de la ciencia(pensando voluntad como la pensaría Nietzsche aunque el de seguro  no estaría de acuerdo...)Como concepto a demostrar desde la ciencia,y digo lo más experimental de ella,por lo tanto más que concepto es tesis, es que se plantea entonces su existencia,o no.